Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Digo, pues, por la gracia que me es dada, a cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí que el que debe tener, sino que piense de sí con cordura, conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno. Porque de la manera que en un cuerpo tenemos muchos miembros, pero no todos los miembros tienen la misma función, así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros.la semana pasada el grupo de jóvenes tuvo un devocional preparado por Eduardo acerca de la vocación, un tema que estaba en la lista y que se ha presentado en las últimas dos películas que hemos visto. Estamos justo viendo si cambiamos el día de reunión a los jueves en vez del sábado, así que esa semana nos juntamos el jueves 11, como primera prueba.
Romanos 12:1-5
Hace mucho que no teníamos un devocional como éste. Como en los viejos tiempos empezamos con el himnario antiguo y la guitarra para cantar "Otra vez" (que fue por mucho LA canción del grupo xD), "Oye Padre" y "Ven, sube a la montaña" (que era la canción preferida del Martin). Analizamos la diferencia entre profesión y vocación y los casos en que éstas coinciden y cuáles no. Hablamos de nuestra experiencia, de qué queremos formarnos (o nos estamos formando) para trabajar, y qué es aquello a lo que nos sentimos llamados a dedicarnos, aquello que nos llena. ¿Cómo haremos que coincidan éstas dos cosas? ¿Cómo es eso de la bivocación? ¿Se puede decir que se tiene una vocación distinta en cada una de las áreas de nuestra vida? ¿Como las integramos en lo que somos?...... Bueno, que Dios nos ilumine y ayude a entregar nuestras vidas a Él, que nos permita autorrealizarnos con nuestro trabajo y que podamos ser de provecho, no solo para nosotros, sino que para aquél cuerpo del que somos parte. ¡Amén!
No hay comentarios:
Publicar un comentario